Nutrición y actividad física en personas mayores de España y China
- Alba Niño González
- Pilar Sánchez Collado Directora
- José G. Villa Vicente Director
Universidad de defensa: Universidad de León
Fecha de defensa: 01 de julio de 2022
- Nuria Garatachea Vallejo Presidente/a
- Juan Mielgo Ayuso Secretario/a
- María José Cuevas González Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
Introducción: El proceso del envejecimiento se entiende como un proceso dinámico y plástico en el que se involucran diversos cambios a nivel fisiológico y funcional, siendo modificable o modulable atendiendo a modificaciones externas y factores del estilo de vida. La nutrición y la actividad física regular han demostrado su contribución única a la salud funcional y el equilibrio energético, siendo una intervención basada en la evidencia para prevenir y controlar enfermedades y afecciones crónicas. El presente estudio se diseñó con la finalidad de estudiar la nutrición y la actividad física en cuatro grupos de personas mayores de 65 años. Estos grupos se formaron con practicantes de Gimnasia de Mantenimiento, Tai Chi (tai ji quan) y Tai Chi Profesional con la finalidad de comprobar si existen diferencias entre ellos al compararse con otro grupo control de sedentarios. Metodología: Este estudio se realizó con personas mayores originarias y residentes en España y en China, los cuales formaron un total de 113 personas (71,53±6,92 años). 36 eran practicantes de Gimnasia de Mantenimiento (n=30 mujeres y n=6 hombres), España. Un 2º grupo lo conformaron 27 practicantes de Tai Chi (n=21 mujeres y n=6 hombres), España. Un tercer grupo de 27 deportistas de Tai Chi Profesional, que mantenían una práctica continuada de vida de este deporte siendo además competidores asiáticos en la categoría Senior (n=12 mujeres y n=15 hombres), China. Y un 4º grupo de 23 personas que correspondió al grupo control sedentario (n=14 mujeres y n=9 hombres), España, el cual no practicaba ningún tipo de actividad física en la actualidad, ni lo había practicado en las últimas décadas. Para evaluar su alimentación se utilizó el Programa informático DIAL® con la posterior recogida en la base de datos; y para evaluar su actividad física se realizó el test adaptado para la tercera edad, Senior Fitness Test (SFT). Resultados: No se muestran diferencias de género antropométricas entre la población mayor española o china, difiriendo ambas en una mayor talla de la población china, la cual presenta a su vez un IMC menor (en rango de normalidad vs el sobrepeso de los españoles) y difiriendo en función de la actividad física practicada al ser menor en practicantes de Tai Chi. El patrón dietético se muestra como “muy bueno” con perfiles inadecuados que necesitan mejorar al ser una ingesta energética algo deficiente en el aporte recomendado (88% RDA) con una prevalencia de inadecuación de ~45%, sin diferencia de género, ni de población, ni en la práctica de actividad física (mejor en grupo de Tai Chi). Perfil inadecuado donde los carbohidratos se consumen por debajo de los objetivos y las proteínas y lípidos lo hacen por exceso, con prevalencias de inadecuación muy mayoritaria en la población española y menor en la población china. Perfil lipídico de mala calidad al ser excesivo en AGS, AGP y colesterol, y deficitario en AGM, con prevalencia de inadecuación mayoritaria en ambas poblaciones (el aporte de lípidos AGS y AGP en población china es menor). Los micronutrientes flúor, yodo y vitamina B9 no aportan lo recomendado, al igual que se consumen deficitariamente la vitamina D, el calcio, el magnesio, la vitamina E y el zinc. El consumo de la vitamina C es excesivo, al igual que los aportes de vitaminas B1, B2, B3, B6, B12, K, fósforo, hierro y selenio. No hay apenas diferencias de género relevantes en ambas razas, ni tampoco entre ellas ni se modifican con la práctica de actividad física (aporte de vitamina B5, B12, calcio, zinc y selenio mayor en Gimnasia de Mantenimiento). No contribuye a la calidad de su dieta el exceso en el aporte de sodio y el déficit de fibra, ácidos grasos omega-3, relación calcio/fósforo y agua con una prevalencia de inadecuación mayoritaria (65%-100%), aunque la población mayor china la mejora mostrando un menor aporte de sodio. La calidad de la dieta se califica de “muy buena” y sin diferencia de género, tanto en población española, siendo algo mejor en la mujer (73,6 vs 76,4 puntos), como entre la población española y china practicante de Tai Chi (78 vs 78). Contribuyen a ello en población española un inadecuado cumplimiento en cereales y legumbres, y adecuado en verduras y hortalizas, frutas, lácteos, carnes, pescados y huevos, sodio aportado por los alimentos, colesterol y variedad de alimentos, además de menor puntuación según el cumplimiento de los objetivos en el porcentaje de calorías aportadas por lípidos y AGS. En cambio, la población mayor china difiere con una muy buena puntuación en cereales y legumbres, en sodio aportado por los alimentos y porcentaje de calorías aportadas por lípidos y AGS, pero con menor en aporte de frutas y lácteos; mientras que no difieren en la buena puntuación de verduras y hortalizas ni en carnes, pescados y huevos, ni en variedad de alimentos. La práctica de actividad física parece contribuir a mejorar la puntuación de la calidad de la dieta (72,3 en sedentarios; 75,8 en Gimnasia de Mantenimiento; 78,3 en Tai Chi). Para los resultados de las pruebas del SFT, las pruebas de Fuerza, Flexibilidad y Agilidad muestran que no hay diferencia de género en población mayor española (mujeres obtienen mejores resultados), y que la población mayor china difieren en su mayor Fuerza y Flexibilidad (mujeres chinas muestran menos Fuerza de Brazos y más Agilidad). La práctica del Tai Chi muestra mejor condición física respecto a sedentarios (en todas las pruebas) y Gimnasia de mantenimiento (en Flexibilidad y en Fuerza de Piernas); al igual que en esta los resultados también son mejores que en sedentarios (menos en Flexibilidad). Conclusiones: Las mayores diferencias observadas en la población mayor española y china no proceden de su alimentación y si de su actividad física, por lo que parece necesario priorizar las políticas y estrategias para promover, fomentar y lograr una mayoritaria práctica de actividad física en esta población (imprescindible para evitar la fragilidad, vulnerabilidad y morbilidad vinculada al envejecimiento) como irremplazable elemento de mejora de la dieta y patrón mediterráneo.