Educación corporal y distinción nobiliaria en el "Libro de los Estados" de Don Juan Manuel

  1. Vicente Pedraz, Miguel
Revista:
Apunts: Educación física y deportes

ISSN: 1577-4015 2014-0983

Año de publicación: 1996

Número: 43

Páginas: 13-24

Tipo: Artículo

Otras publicaciones en: Apunts: Educación física y deportes

Resumen

El Libro de los Estados de Don Juan Manuel se muestra como una de las más claras expresiones de la ambivalencia en que se mantuvo la consideración del cuerpo en la Baja Edad Media cristiana. Por un lado se atiene a los mandatos de renuncia de lo mundano pero, a la vez, constituye un canto al cuerpo y a las realidades físicas. Esto se pone de relieve, entre otros aspectos, en la consideración principal que confiere a la educación física del infante caballero. Aunque no el único, según el imaginario del autor, uno de los cometidos de la educación corporal consiste en reafirmar lo que la sangre de por sí concede a los linajes nobiliarios: la excelencia que, en sí misma, es el mejor modo de distinción social. Pues bien, la excelencia encuentra su afirmación, sobre todo, en la lógica aparencial y escenográfica que rige en los dominios ceremoniales y domésticos, es decir, en cierta morfología, en cierto orden gestual, en ciertos hábitos y habilidades, en ciertas prácticas, en la cosmética, en las concepciones higiénicas, en el vestido, etc. pertenecientes al universo sublimado y distinguido del cuerpo en la medida en que por ellos se distinguían los actos excelentes de los actos viles