La construcción del templo gótico

  1. Herráez Ortega, María Victoria
Libro:
Congreso Internacional "La Catedral de León en la Edad Media": actas : León, 7-11 de abril de 2003, Auditorio Ciudad de León
  1. Yarza Luaces, Joaquín (ed. lit.)
  2. Herráez Ortega, María Victoria (ed. lit.)
  3. Boto Varela, Gerardo (ed. lit.)

Editorial: Servicio de Publicaciones ; Universidad de León

ISBN: 84-9773-161-1

Año de publicación: 2004

Páginas: 145-176

Congreso: Congreso Internacional "La Catedral de León en la Edad Media" (1. 2003. León)

Tipo: Aportación congreso

Resumen

La iglesia de Santa María de Regla responde, en su aspecto general, a los principios del gótico radiante que se desarrolló en Francia a partir de 1231. Sin embargo, el estudio de la documentación, al hilo de las condiciones políticas, sociales y económicas de la sede leonesa, indica que las primeras trazas para el edificio gótico pudieron gestarse en torno a 1230, momento en que Fernando III unió el reino de León a la Corona de Castilla y las catedrales de Burgos y Toledo se levantaban según el opus francigenum. No es fácil diferenciar distintas campañas constructivas a partir de la lectura de paramentos, debido fundamentalmente a las restauraciones sufridas en el siglo XIX. Dentro de su aparente unidad, la estructura de la iglesia presenta problemas de articulación en dos puntos, precisamente aquéllos en donde la planta se apartó de su modelo champañés, la catedral de Reims: el encuentro de los muros de las naves laterales con las torres occidentales, especialmente en el lado Norte, y los arcos de la cabecera sobre los que se construyeron las torres-contrafuerte. Los desajustes que se aprecian estarían en relación, respectivamente, con el planteamiento de un cuerpo occidental previo al proyecto gótico y con un cambio de plan posterior destinado a imprimir al templo, de clara progenie champañesa, el aspecto diáfano que presenta, adscrito a la corriente francesa del gótico radiante más avanzado. La realización de trazas y diseños permitió mantener la unidad formal del conjunto, a pesar de la existencia de algún periodo de inactividad, del cambio de maestros y de la adecuación de proyectos. Los trabajos debieron iniciarse por las naves de la iglesia, al tiempo que se levantaba el zócalo de la cabecera. Es difícil precisar su avance, condicionado en las dos décadas siguientes por los problemas que atravesaba la diócesis. En estas primeras etapas destaca el papel de Martin Rodríguez "el Zamorano" (1238-1242), necesariamente limitado por su breve prelatura. La capacidad gestora y organizativa del obispo Martín Fernández (1255-1289), apoyada en su amistad con el rey Sabio, permitió llevar la empresa a buen puerto; en su episcopado se inició la construcción de las capillas radiales para continuar con la parte superior de las naves y el cerramiento del crucero. En 1285 el templo estaba finalizado en sus aspectos esenciales. Si bien es cierto que la monarquía estuvo vinculada a la iglesia mayor leonesa desde su fundación, la implicación de los prelados y la del cabildo, no siempre suficientemente valorada, fue el motor esencial que hizo posible el desarrollo de un proyecto tan ambicioso en apenas cinco décadas.