Estudio de la capacidad antioxidante del ácido docosahexaenoico (dha) en ciclistas

Resumen

Los estudios realizados actualmente en humanos reflejan un déficit de ácidos grasos n-3 evidenciado en datos plasmáticos, membranas de plaquetas y tejidos procedentes de autopsias. El ejercicio físico de larga duración provoca un incremento de la acción oxidativa sobre el ADN. Una de las lesiones más frecuentes es la hidroxilación de la deoxiguanosina en la porción C8, lo que da lugar a la formación de 8-hidroxi-deoxiguanosina (8-OHdG). Nuestro estudio se propone analizar los efectos sobre el daño oxidativo y el rendimiento físico en deportistas tras ingerir un triglicérido estructurado con el ácido docosahexaenoico (DHA) en posición 2, en dosis de 2,1 g/24 h durante tres meses. Material y Métodos Estudio experimental: ensayo clínico. Se han seleccionado, de forma aleatoria, a 18 ciclistas varones, cada ciclista realizó 5 pruebas de esfuerzo en tres meses (2 triangulares maximales y 3 rectangulares de 90 minutos de duración al 70% del VO2 max).Tras la realización de las primeras pruebas los ciclistas consumieron DHA-A a razón de 2,1 gr/día. Se realizó análisis del daño oxidativo a ADN y lípidos y valoración del rendimiento mediante observación de variables en el umbral ventilatorio 2. Análisis estadístico: Para la comparación de las variables se realizó ANOVA para medidas repetidas con un factor intrasujeto (tiempo de consumo de DHA-A) y un factor intersujeto (nivel deportivo). Resultados La ingesta continuada de DHA por encima de tres semanas produce un incremento de la capacidad antioxidante total del plasma (p<0,05), disminuye el daño al ADN (p<0,035) y a lípidos (p<0,05). Por otro lado, aumenta la carga y frecuencia cardíacas, así como el porcentaje del VO2max en el umbral ventilatorio 2. Finalmente, la glucemia disminuye menos a lo largo de la prueba de esfuerzo que se realiza al final del ensayo (p<0,001). Conclusiones La unión de los efectos de disminución del daño oxidativo, aumento del rendimiento y normoglucemia durante un esfuerzo de larga duración, son resultados no esperados ni conocidos en investigaciones precedentes. Dado que los estudios previos realizados con ácidos grasos n-3 (mezclas de eicosapentaenoico y docosahexaenoico) no encuentran relación entre su ingesta y mejoras en el rendimiento, nuestro hallazgo en este sentido, pensamos que es debido a la acción específica del ácido graso estudiado