Epizootias, zoonosis y epidemiasel intercambio de infecciones y parasitosis entre el Viejo y Nuevo Mundo

  1. MÁRQUEZ RUIZ MIGUEL ÁNGEL JACINTO
Dirigida por:
  1. Jesús Paniagua Pérez Director

Universidad de defensa: Universidad de León

Fecha de defensa: 15 de diciembre de 2006

Tribunal:
  1. Miguel Cordero del Campillo Presidente/a
  2. Juan Ramón Álvarez Bautista Secretario
  3. José Lucio Mijares Pérez Vocal
  4. Francisco A. Rojo Vázquez Vocal
  5. Ramón María Serrera Contreras Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

El objeto de presente trabajo de tesis es averiguar las consecuencias que tuvo la relación de las poblaciones humanas y animales de Europa, América y África, tras el descubrimiento de América, desde el punto de vista del intercambio de agentes morbígenos. Partiendo de un análisis de la situación de la América prehispánica y de España en el siglo XV, se han investigado las noticias sobre enfermedades del hombre y de los animales que figuran en las Crónicas de Indias, en las obras relativas a las ciencias biomédicas y en otras fuentes secundarias. Con el hombre y los animales viajaron al Nuevo Mundo agentes morbosos conocidos en Europa, más los incorporados con el tráfico de esclavos desde África. Recíprocamente, vinieron a Europa otros antes desconocidos. Otros pasaron a África. Se comprueba que abundan las noticias de padecimientos humanos, pero son pocos los datos sobre patología veterinaria, salvo en los casos de la zoonosis, lo que se explica porque los conquistadores y colonizadores daban cuenta de lo que les afectaba directamente, mientras que los ganados prosperaron tan ampliamente que alcanzaban escaso valor y no requerían especiales cuidados, aparte de que eran escasos los albéitares/veterinarios. El balance indica que pasaron a América 35 agentes infecciosos y parasitarios, mientras que solo tres enfermedades vinieron a Europa: la sífilis humana, el moquello canino y la mixomatosis del conejo. Varias parasitosis africanas llegaron a América y el continente negro recibió Tunga penetrans. Es destacable el papel de la gripe, el sarampión, y sobre todo la viruela, como causas de la desaparición de las poblaciones indígenas en las Antillas y en parte del continente americano, lo que se ha calificado como una "guerra biológica inadvertida", consecuencia de la difusión de los agentes causales entre poblaciones que vivían aisladas y ofrecían sus organismos carentes de protección inmunitaria y, por ello, eran plenamente receptivos.