El síndrome de la mujer maltratada y su relación con los procesos educativos de sus hijos

  1. Lopez Curbelo, Josefina
Dirigida por:
  1. Carmen Requena Hernández Directora

Universidad de defensa: Universidad de León

Fecha de defensa: 18 de octubre de 2017

Tribunal:
  1. Francisco Salto Alemany Presidente
  2. Inmaculada Plaza García Secretario/a
  3. Yolanda Alarcón Baronn Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

El síndrome de la mujer maltratada tiene un efecto más allá de la vivencia personal de quien lo sufre, pues afecta al grupo familiar, concretamente al estilo educativo que la mujer emplea con sus hijos. Expertos en maltrato como Walker, (1984) aseguran que la mujer maltratada ocupa la mayoría de su tiempo en conductas de supervivencia y a vivir en miedo, sin tiempo de interacción placentera. En Puerto Rico las leyes desarrolladas en contra de la violencia doméstica se focalizan en proteger la vida de la mujer víctima de violencia lo que con frecuencia choca con derechos fundamentales a la educación de sus hijos. La finalidad de la investigación es identificar las necesidades emocionales y académicas de los estudiantes que viven en casas de acogidas donde su prioridad es salvaguardar su vida. La metodología de la investigación se conforma con dos grupos de estudio, un grupo de niños que vive en casas de acogida y un grupo de niños que viven en un ambiente familiar normalizado. El instrumento de evaluación PIHCEE mide el grado de maduración emocional y cognitivo de los participantes, fue creado y validado para este estudio. El instrumento muestra validez de contenido con .97 (0.8307 para el grupo de niños que están en casas de acogida y 0.976 para los niños que viven con sus padres). Los ítems miden (a escala Likert) un mismo constructo y están altamente correlacionados. Se condujo un estudio cuasi-experimental con grupo experimental (niños de casas de acogida) y control (niños que viven en ambiente normalizado) comparando las respuestas verbales y emocionales a una serie de láminas que mostraban situaciones relacionadas con la familia, con sus iguales y contexto escolar de un grupo de niños que viven en casas de acogida y niños que viven con sus familias. La hipótesis que se sometió a prueba fue si existía o no diferencia significativa entre las puntuaciones de las rúbricas obtenidas por los niños viviendo en hogares regulares versus lo que vivían en casas de acogida. El nivel significativo para decidir si se rechazaba o no la hipótesis nula fue .05. Los procedimientos estadísticos que se utilizaron para realizar las cuatro comparaciones entre los dos grupos de niños fueron: la prueba paramétrica “t” para dos muestras independientes (comparando los promedios) y la prueba no paramétrica de Mann-Whitney (comparando las medianas). De las dos, la más apropiada es la de Mann-Whitney porque no asume normalidad en la distribución de las variables, además que, por su naturaleza, las rúbricas fueron variables ordinales; sin embargo, la prueba t se usó para corroborar si se obtenían conclusiones análogas. Los resultados obtenidos ponen de manifiesto diferencias significativas entre los dos grupos de niños tanto en situaciones relacionadas con escenas familiares, con sus iguales y escolares. En relación a las láminas con escenas familiares violentas, los niños que viven en casas de acogida respondían que llamarían a la policía frente al otro grupo que no mostraba alternativas. En las láminas relacionadas con el contexto escolar, los niños de casas de acogida respondían con mayor número de emociones negativas ante preguntas relacionadas con preferencias de asignaturas, las calificaciones eran más bajas que las del otro grupo y solo cuentan con el apoyo escolar de la madre frente al otro grupo que tiene apoyos por diferentes miembros de la familia. En general, llama la atención la conducta emocional de los niños de casas de acogida a las diferentes escenas que componen el test. O bien mostraban una reacción emocional neutra ante una escena violenta o bien mostraban emociones desajustadas ante una lámina que ilustraba una escena neutra. La conclusión del estudio sobre el ajuste emocional y escolar de niños que viven en casas de acogida es que para que estos niños tengan un desarrollo emocional y cognitivo adecuado las autoridades deben regular la protección no solo a las madres sino velar por los derechos de los niños de las madres que sufren violencia de género. Téngase en cuenta que los niños que viven en casas de acogida tienen como máximo referente de aprendizaje, a una madre con estrés postraumático.