Análisis, valoración y establecimiento de las medidas correctoras de los efectos hidrogeológicos de subsidencia y medioambientales producidos como consecuencia del cese y abandono de labores en una explotación minera en un entorno urbano

Resumen

El cese de los trabajos de explotación del yacimiento de carbón de Mina La Camocha S.A., en San Martín de Huerces (Gijón), y por tanto el consiguiente abandono de las labores mineras y resto de los servicios auxiliares, lleva aparejados una serie de problemas de diversa índole, como son los sociales, medioambientales, urbanísticos, etc). Uno de los efectos más importantes que se van a ocasionar, sería el debido al cese del bombeo de las aguas que se infiltran al interior de la mina y que en estos momentos y ya desde hace bastantes años se ha mantenido en torno a los 70m3/hora. Era de sobra conocido el acuífero, cuestión de estudio, para los técnicos de Mina La Camocha y de los trabajadores que también lo sufrían ya desde principios del siglo XX, ya que en los dos primeros intentos de profundización de los pozos tuvieron que desistir como consecuencia del aporte de aguas del acuífero. Este conocimiento estaba contrapuesto con la creencia de investigadores de otros organismos, cuya apuesta siempre era por la de un Pérmico al que consideraban totalmente impermeable. Este hecho por tanto se considera de extrema importancia al encontrarse en un área de arcillas expansivas, con afectación a pequeñas capas de yesos, que en la actualidad se encuentran en un nivel freático artificial muy inferior al real como consecuencia de la actividad minera y que con seguridad se inundarán una vez recuperado el nivel freático real de la zona afectada por la explotación. Por otro lado, toda excavación subterránea, ya sea una obra civil o una explotación minera, es una causa potencial de roturas y flexiones de los terrenos suprayacentes que producen un hundimiento de la superficie del terreno. Tal fenómeno se conoce con el nombre de subsidencia. Simultáneamente, aparecen esfuerzos de tracción y de compresión, que pueden producir deformaciones en las instalaciones o edificaciones construidas en la zona de la superficie que se encuentre situada sobre la citada excavación. En lo concerniente a la minería subterránea, comporta, en primer lugar, una compleja red de pozos y galerías, de longitudes kilométricas, que en ocasiones presentan secciones muy importantes y cuya extensión suele ser también kilométrica. Dependiendo de la amplitud de los huecos abiertos, los efectos producidos en la superficie podrán ser importantes, debiendo tenerse muy en cuenta cuando se trate de edificaciones, obras de fábrica, ferrocarriles, conducciones de agua, etc. A su vez, las afecciones medioambientales que genera la existencia de antiguas estructuras mineras abandonadas, fundamentalmente escombreras y balsas de lodos, son objeto de estudio y análisis de cara a la puesta en valor, no solo de los materiales constituyentes, si no también de los terrenos que éstas ocupan, y que como se verá son de dimensiones importantes. Por tanto, de cara a proceder al cierre de una explotación minera como la que ha sido objeto de ésta Tesis Doctoral, Mina La Camocha, S.A., totalmente integrada en un entorno urbano, rodeada de poblaciones, viviendas unifamiliares, industrias, etc, se hace imprescindible valorar los efectos hidrológicos y de subsidencia que la falta de mantenimiento en los pozos y galerías ocasionarán en la superficie, así como los efectos medioambientales que se producirán como consecuencia del cese de las labores y consiguiente abandono de las distintas instalaciones inherentes a una explotación minera de estas características.