Gestión y conservación de buitres en la Cordillera Cantábrica

  1. Mateo Tomás, Patricia
Dirigida por:
  1. Pedro P. Olea Director/a
  2. Francisco J. Purroy Director/a

Universidad de defensa: Universidad de León

Fecha de defensa: 07 de mayo de 2009

Tribunal:
  1. Elías Fernando Rodríguez Ferri Presidente
  2. Rafael de Garnica Cortezo Secretario/a
  3. Salvador J. Peris Vocal
  4. Javier Viñuela Madera Vocal
  5. Francois Sarrazin Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 234282 DIALNET

Resumen

Las dos especies de buitre presentes en la Cordillera Cantábrica parecen encontrarse en un buen estado de conservación. Mientras que la población de Alimoche Común (Neophron percnopterus) puede considerarse estable (169 parejas reproductoras), la población de Buitre Leonado (Gyps fulvus) ha experimentado un importante incremento tanto en población como en área de distribución en las últimas cuatro décadas. Este buen estado de conservación de ambas especies contrasta con la compleja situación que atraviesan muchas poblaciones de Alimoche Común y de Buitre Leonado tanto en España como en el mundo. Su buena situación parece ser debida a la conservación en el área de estudio de usos humanos tradicionales integrados en el medio como la ganadería extensiva o la actividad cinegética. La actividad ganadera desarrollada en el área de estudio es un factor clave para garantizar la presencia de los territorios de Alimoche Común. En concreto, la ganadería ovina y caprina constituye un factor fundamental para el mantenimiento de esta especie en la Cordillera Cantábrica. La ganadería extensiva y, especialmente, la actividad trashumante también tiene una importante influencia en la población de Buitre Leonado del área de estudio. Se trata de una importante fuente de alimento para buena parte de la población cantábrica de Buitre Leonado (755 buitres/día) durante el verano y el otoño. El régimen extensivo y la complicada orografía del área de estudio dificultan la aplicación de la normativa sanitaria que obliga a recoger los cadáveres de ganado del campo, permitiendo así la existencia de una fuente de alimentación fundamental para las especies de buitre estudiadas y para otras muchas especies consumidoras de carroñas. La caza es otra actividad de explotación de los recursos naturales por parte del ser humano que parece desempeñar también un papel fundamental en el mantenimiento de la población de Buitre Leonado estudiada. La existencia en el área de estudio de una elevada actividad cinegética, principalmente centrada en grandes ungulados silvestres, constituye una importante fuente de alimentación para el Buitre Leonado, sobre todo mediante los cadáveres de ciervo y jabalí. La conservación de las poblaciones de Alimoche Común y Buitre leonado en la Cordillera Cantábrica requiere el diseño de medidas a dos niveles: especie y ecosistema. A nivel de especie se requiere continuar con el seguimiento de las poblaciones estudiadas mejorando los censos, especialmente del Alimoche Común, una especie amenazada que resulta difícil de localizar, y aplicando de modo real y efectivo las medidas de control y seguimiento establecidas en los numerosos espacios protegidos del área de estudio. A nivel de ecosistema debería desarrollarse una política integradora que considere tanto el ecosistema natural como las actividades que el ser humano realiza y que conservan todavía cierto carácter tradicional. Es necesario tener en cuenta la función que estas actividades desempeñan no sólo en la conservación de estas especies sino del ecosistema en general. El mantenimiento de la ganadería extensiva, y especialmente del sector ovino y caprino y de la actividad trashumante, debe ser considerado a la hora de garantizar la conservación de los ecosistemas en equilibrio que todavía sobreviven en la Cordillera Cantábrica.