Genero y crecimiento económico
- OSCANOA VICTORIO, MERY LUZ
- Esther B. del Brío González Director/a
- Laura Cabeza García Codirectora
Universidad de defensa: Universidad de Salamanca
Fecha de defensa: 28 de junio de 2018
- Alberto de Miguel Hidalgo Presidente/a
- María Esther Martínez Quinteiro Secretario/a
- María Asunción Sacristán Navarro Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
GÉNERO Y CRECIMIENTO ECONÓMICO En la presente Tesis se investigaron los factores de género que desencadenan el crecimiento económico en los países de ingresos altos y bajos. Para abordar estos factores de género, se consideraron cuatro dimensiones características de la inclusión de género: educación, acceso al mercado laboral, fertilidad y democracia. La relación entre el crecimiento económico y los factores de género se analizó en una muestra de 127 países. El valor y la solidez se agregaron a los resultados utilizando modelos dinámicos aplicados a los datos del panel a la vez que daban cuenta de la endogeneidad. Concluimos que la alta fertilidad en las mujeres tiene efectos negativos sobre el crecimiento económico. Sin embargo, cuando las mujeres tienen un mayor acceso a la educación secundaria y al mercado laboral en condiciones de igualdad, los efectos son positivos. De manera similar, el acceso de las mujeres a la participación política activa tiene efectos significativos en el crecimiento económico. En general, este estudio ayuda a identificar qué factores de género pueden promover el crecimiento económico inclusivo, que es el crecimiento económico logrado cuando hombres y mujeres se incorporan en condiciones de igualdad. Asimismo el crecimiento económico de un país depende del desarrollo humano y éste se obtiene mediante la educación, esto hace posible incrementar el empleo y los ingresos, reduciendo así la pobreza incrementando el bienestar social. Asimismo, a pesar de que en los últimos años se ha producido una disminución significativa de la desigualdad de género aun la brecha sigue persiste, sobre en las economías emergentes. Un incremento en el nivel educativo de las mujeres impulsa un significativo crecimiento en el nivel económico, mejorando por tanto el nivel y calidad del desarrollo humano de las siguientes generaciones de un país. En el mercado de trabajo las mujeres suelen recibir salarios más bajos y laboran en su mayoría en trabajos poco calificados; además trabajan menos horas que los hombres y tienen menos acceso a escalar mejores posiciones laborales. La brecha salarial es un problema porque impide la equidad en la distribución de los ingresos. Reflejándose esta brecha en las diferenciaciones salariales entre hombres y mujeres, impidiendo a estas tener responsabilidades en el campo laboral. Los resultados del análisis de regresión realizados muestran que la educación y la brecha salarial de las mujeres incrementa de manera positiva y significativa el crecimiento económico del país. Finalmente se investiga los efectos de la inclusión financiera femenina en el desarrollo económico. La inclusión financiera, entendida como acceso a productos y servicios financieros de diversa calidad, podría tener un efecto positivo en la reducción de la desigualdad de ingresos. Específicamente, cuando las mujeres participan en el sistema financiero, la brecha de desigualdad disminuye, pudiendo esperar que el desarrollo económico, así como el bienestar, tanto físico como social, sean más altos. Se realizó un análisis de regresión de una muestra de 57 países, tanto desarrollados como emergentes, utilizando datos de la base de datos Global Findex (2015) y del Banco de datos del Banco Mundial. Nuestros resultados efectivamente proporcionan evidencia sobre el hecho de que una mayor inclusión financiera de las mujeres, medida como fondos prestados de una institución financiera, tiene un efecto positivo en el desarrollo económico. Al empoderar a las mujeres financieramente, se estimula toda la economía de un país y se promueve el desarrollo económico. Se destaca la importancia de reducir la brecha de género en la inclusión financiera y se abren nuevos campos de investigación y nuevas bases de datos para mejorar el estudio de la igualdad de las mujeres. Los gobiernos y las instituciones financieras deberían trabajar juntos para reducir la brecha de género en la inclusión financiera y para mejorar el desarrollo económico empoderando a las mujeres. Dos objetivos se obtendrían simultáneamente.