Enfermedad cardiovascular, hiperhomocisteinemia y proteínas de choque térmico
- Dulín Iñiguez, Elena
- Pedro García Barreno Director/a
- María Concepción Guisasola Zulueta Director/a
Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid
Fecha de defensa: 25 de septiembre de 2009
- Raffaella Pagani Balletti Presidente/a
- Manuel Serrano Ríos Secretario/a
- Inés Díaz-Laviada Marturet Vocal
- Ciriaco Aguirre Errasti Vocal
- María José Cano Rábano Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
La aterosclerosis, principal causa de enfermedad cardiovascular, constituye un complejo proceso inflamatorio crónico que se inicia con el daño celular a nivel del endotelio y termina con la formación de lesiones estratificadas en la pared arterial. En respuesta a agentes aterogénicos como hipercolesterolemia, hábito tabáquico, resistencia a la insulina, agentes infecciosos o hiperhomocisteinemia, el endotelio se activa expresando moléculas de adhesión en su superficie, incrementando su permeabilidad a lipoproteínas, sintetizando y secretando citoquinas. Como consecuencia, leucocitos mononucleares migran y se adhieren a la pared del vaso, acumulándose lipoproteínas en el espacio subendotelial, cuya oxidación contribuye al proceso inflamatorio por activación de macrófagos, que a su vez sintetizan citoquinas y factores de crecimiento que promueven la atracción de células musculares lisas, estimulando la angiogénesis. La adhesión plaquetaria a la superficie endotelial y la secreción de quimiocinas y factores de crecimiento contribuye a la migración de células musculares lisas desde la media a la íntima, estimulando la producción extracelular de proteinas de la matriz. La formación de la capa fibrosa que rodea el ateroma y la continua acumulación lipidica por macrófagos da lugar a la formación de células espumosas. Dependiendo del espesor de la capa fibrosa se producirá la ruptura, con la consiguiente exposición del core necrótico del ateroma a la sangre, agregación plaquetaria con trombosis y potencial infarto.