Riesgo tromboembólico en pacientes que han superado la infección por SARS-CoV-2

  1. González-Revuelta, Enrique 1
  2. Lago-Gancedo, Héctor 1
  3. Camacho-Montes, Borja 2
  4. Leiva-Bisbicuth, Sonia Paola 1
  5. Iglesias-Vela, Marta 3
  6. Seco-Calvo, Jesús 4
  1. 1 Medicina de Familia y Comunitaria. G.A.P. León, España. Grupo de trabajo SEMESMIR-Castilla y León, España.
  2. 2 Medicina de Familia y Comunitaria. G.A.P. León, España.
  3. 3 Servicio de Urgencias. Complejo Asistencial Universitario de León, España.
  4. 4 Instituto de Biomedicina (IBIOMED). Universidad de León, España.
Revista:
Revista Española de Urgencias y Emergencias

ISSN: 2951-6552 2951-6544

Año de publicación: 2023

Volumen: 2

Número: 1

Páginas: 19-23

Tipo: Artículo

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Resumen

INTRODUCCIÓN. La infección por SARS-CoV-2 ha presentado una alta frecuencia de episodios tromboembólicos como complicación. Sin embargo, los efectos ya superada la fase aguda continúan siendo un interrogante, desconociéndose si el efecto protrombótico persiste. MATERIAL Y MÉTODO. Estudio de casos y controles que definió como casos los tromboembolismos atendidos en urgencias hospitalarias entre el 1 noviembre de 2020 y el 31 de marzo de 2021. Se comparó con una serie de controles seleccionados entre las consultas a urgencias en el mismo periodo con el fin de conocer, atendiendo al antecedente de COVID-19, el riesgo protrombótico de la misma. Finalmente, se realizó un modelo predictivo sobre estos episodios mediante regresión logística binaria. RESULTADOS. Se seleccionaron 179 casos y 390 controles. La mayoría de los casos se debieron a accidente cerebrovascular y síndrome coronario agudo (30,2 y 21,2%, respectivamente) y 17 (9,5%) presentó antecedente de COVID-19 superada recientemente. De los 390 controles, 35 (8,9%) había padecido la infección. Estos datos arrojaron una OR de 1,064 (IC 95% de 0,58-1,96), así como un modelo de escaso poder predictivo (R2 = 0,028). El tamaño del efecto fue pequeño en todas las variables del modelo, si bien en la gravedad con la que se padeció la COVID-19, el tamaño del efecto fue medio (0,2). CONCLUSIONES. El riesgo protrombótico en pacientes que ya han superado la enfermedad por COVID-19 no es significativamente mayor. Su manejo clínico no exigiría de anticoagulación profiláctica durante periodos prolongados.